Muchos arquitectos se preguntan sobre lo que ocurre se produce un cese de actividad al llegar a la edad de jubilaci\u00f3n o, por la raz\u00f3n que sea, deciden cambiar su actividad y empezar un trabajo no relacionado con la arquitectura.<\/p>\n\n\n\n
Esta pregunta frecuente es muy relevante ya que una persona puede dejar de ejercer como arquitecto por jubilaci\u00f3n o cambio de profesi\u00f3n, pero puede seguir recibiendo una reclamaci\u00f3n por obras finalizadas hace tiempo. Es muy importante tener en cuenta que la responsabilidad no termina con el fin de la actividad profesional.<\/p>\n\n\n\n
Las consecuencias de una reclamaci\u00f3n por una obra dise\u00f1ada, dirigida o ejecutada como arquitecto pueden llegar a\u00f1os despu\u00e9s y, pese al tiempo transcurrido, una sentencia judicial podr\u00eda establecer una responsabilidad con serias consecuencias econ\u00f3micas para su patrimonio personal.<\/p>\n\n\n\n
Por esta raz\u00f3n, en los seguros para arquitectos es importante contemplar la opci\u00f3n de cobertura posterior al fin del ejercicio profesional. Es decir, el seguro de responsabilidad civil para arquitectos debe permitir continuar asegurado frente a reclamaciones en caso de situaciones como cese de actividad, jubilaci\u00f3n o fallecimiento. Estar jubilado no quiere decir que no puedan existir reclamaciones profesionales. Lo mismo ocurre si estamos desarrollando una nueva profesi\u00f3n fuera del mundo de la arquitectura.<\/p>\n\n\n\n
El seguro para un arquitecto jubilado o no activo debe contemplar unos l\u00edmites de indemnizaci\u00f3n suficientes para no poner en riesgo el patrimonio. Probablemente se puedan reducir los capitales asegurados frente al seguro de un arquitecto en activo, pero siempre manteniendo unos niveles m\u00ednimos de seguridad.<\/p>\n\n\n\n
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