Para saber que cuidados hay que tener en cuenta en un perro con artrosis, es importante que conozcamos qué es y cómo actúa la enfermedad.

Cada articulación está formada por la unión de dos huesos a través de una cápsula articular. En el interior de esta existe un fluido llamado líquido sinovial producido por una membrana que recubre el conjunto. El extremo de los huesos que se unen están formados por un cartílago articular. Cuando este cartílago se lesiona es cuando se produce la artrosis, originando hinchazón, dolor, rigidez e incapacidad funcional por la movilidad reducida y progresiva del animal.

La artrosis es degenerativa y crónica. Afecta a toda la articulación, incluso a los tejidos que la rodean.

 

Causas

Aunque la enfermedad es mucho más común en razas grandes y perros de avanzada edad, puede darse en cualquier perro, independientemente de estos factores.

La osteoartritis o artrosis en perros suele ser de causa genética. Esta patología es de carácter gradual, por lo que el perro suele ir adaptándose a la situación, pudiendo hacer que resulte difícil detectar que sufre dolores. Además, la percepción del dolor es subjetiva de cada perro, pudiendo manifestarse de maneras muy diferentes la misma afección en dos perros diferentes.

Como ya hemos mencionado, es común que la enfermedad aparezca en edades avanzadas por lo que su diagnóstico se complica aún más, ya que tendemos a asociar el movimiento aletargado y torpe a estas condiciones y no a la artrosis.

 

Síntomas

Los síntomas de artrosis en perros pueden variar en función de muchos aspectos. A veces, las radiografías de la articulación de cadera y codos en perros jóvenes demuestran la presencia de artrosis en ejemplares que no manifiestan signo alguno de problemas articulares. Algunos perros afectados por artrosis pueden llevar una vida sin problemas durante muchos años.

Uno de los síntomas más frecuentes es la rigidez y la cojera, sobre todo cuando dejan de estar en una posición de reposo y justo después de que nuestra mascota haya realizado un ejercicio intenso.

 

Otros posibles síntomas:

  • Reticencia a jugar y a salir de paseo: por dolor articular que impida el movimiento natural de las extremidades
  • Dolor a la palpación
  • Cambios en el comportamiento
  • Lamido de las articulaciones afectadas
  • Fatiga
  • Mayor inquietud

 

Tratamiento de un perro con artrosis

Cuando nuestro perro ha sido diagnosticado con artrosis, generalmente a través de una radiografía, se podrá facilitar analgésicos para poder eliminar o disminuir el dolor. Aunque este tratamiento se puede administrar en forma de pomadas, pastillas, inyecciones o parches, solo puede ser prescrito por el veterinario.

Otra alternativa son los condroprotectores. Se trata de suplementos nutricionales que ayudan a regenerar el cartílago articular dañado al mismo tiempo que alivian el dolor por su efecto analgésico.

La rehabilitación también esta muy recomendada y tiene como fin impedir el aumento de la rigidez en la cápsula articular y la musculatura debido a la inactividad, así como el restablecimiento de una plena movilidad. La rehabilitación puede solventar también la situación de tensión en la musculatura y restaurar la masa y fuerza musculares, además de lograr un alivio del dolor.

Los masajes, estiramientos y entrenamientos específicos para la dolencia también han demostrado ser muy eficaces para mejorar la vida de nuestro perro. Con el masaje conseguimos relajar la zona afectada y el sistema nervioso autónomo, mejorar la circulación de la musculatura y alivia tensiones de los músculos. Del mismo modo pasa con los estiramientos. Ayudan a mejorar la amplitud del movimiento y también alivian el dolor. Y por último, existen entrenamientos específicos para este tipo de dolencias, aunque son menos comunes. Estos son los entrenamientos acuáticos; muy eficaces para el ejercicio cardiovascular y muscular con un estrés mínimo para las articulaciones por su bajo impacto. Además, proporcionara seguridad a nuestra mascota para mover las zonas que tenía vetadas por dolor o incomodidad.

 

Para la prevención y el diagnostico de estos casos, siempre es conveniente contar con un seguro de salud para nuestras mascotas, ya que el veterinario contempla todas las opciones que pueden plantearse durante la vida de nuestro perro y le hace un seguimiento personalizado. Si quieres conocer más sobre las enfermedades más comunes en perros, no olvides visitar este post.