La raza de gato manxes una especie originaria de Man que requiere conocer bien para poder atender sus cuidados. No son muy específicos, pero tiene un origen concreto, unas características físicas determinadas y un tipo de carácter que puede llegar a determinar el cuidado que le das. Si quieres saber más sobre el gato manxpara poder ofrecerle a tu felino un buen cuidado, no dudes en especializar y ampliar tu conocimiento sobre esta raza de gatos.

¿De dónde es originaria la raza de gato manx?

Tendrás que remontarte al siglo XVIII para saber de dónde viene originariamente este gato. Procede de la isla de Man. Allí, hasta hace apenas 300 años, esta raza era muy común. En la actualidad, es mucho más fácil tener felinos de manxen cualquier otra parte del planeta. Como sucede en muchas ocasiones, hay leyendas y cuentos populares que ofrecen una explicación a sus características físicas. Estas cuentan por qué y cómo perdieron sus colas. Aunque son interesantes, son una fantasía y no tienes que conocer todo.

Características físicas del gato manx

Las características físicas del gato manx son bastante peculiares y fáciles de reconocer.

  • Cabezas: son grandes, anchas y redondas, con muchas mejillas y nariz alargada.
  • Las orejas son algo separadas y en punta. 
  • Tienen un cuello corto y fuerte.
  • Los ojos son bastante anchos y redondos, al contrario que otras razas de gatos.
  • Otra cosa bastante peculiar es que tienen las patas de atrás más largas que las de delante.
  • El torso es cilíndrico y bastante curvo.
  • En cuanto al pelo, es de doble capa y sedoso.

Lo que más destaca es su cola, corta y ancha, resultado de un proceso genético. Cuando los genes dominantes son alelos, nace un gato con cola normal, pero si se presenta un gen recesivo, nace un gato con cola manx. Si ambos genes son recesivos, el gen no completa su desarrollo.

Carácter del gato manx

Esta raza es aclamada en Asia. Esto también se debe un poco al carácter de los gatos manx, que combinan a la perfección con las costumbres asiáticas.

  • Son tranquilos, pacíficos y muy domésticos.
  • Se adaptan al ambiente familiar y reclaman atención de la misma.
  • Pueden vivir en exterior.

Cuidados de los gatos manx

Estas características físicas y de comportamiento de los gatos manx llevan a exigir un tipo de cuidado especial a la raza.

Para empezar:

  • Suelen reclamar atención, por lo que son perfectos para personas mimosas que prefieren tener un animal de compañía que no sea completamente autónomo.
  • Esta raza es alergénica y requiere un baño semanal y también que le cepilles semanalmente el pelo para eliminar pelos muertos y que su pelaje brille.
  • También debes cuidar su alimentación porque son gatos sanos y longevos.

Aunque lo puedes tener en casa, también necesita algo de aire libre, por lo que es perfecto para casas de campo o fincas, así como necesario pasearlo si se vive con él en un piso de ciudad. Para ello, podrás comprar una correa que te permita sacarlo a la calle sin peligro o bien llevarlo en el portagatos hasta una zona libre de peligros en donde pueda tomar el sol y correr un poco. Este requisito encaja a la perfección con las visitas asiduas al veterinario, que se encargará de comprobar su buen estado de salud regularmente.

En definitiva, la raza de gato manx es muy reclamada en Asia y tiene unas características físicas peculiares y un carácter tranquilo y acogedor. Se adaptará a ti si le ofreces la atención que necesita, que en realidad no es mucha. Si quieres convivir con un gato así, recuerda ofrecerle algunos minutos en el exterior al día, como mínimo, para que viva feliz y contento todo el año.

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