Seguros de salud para personas mayores: ¿hay alguna diferencia?

Los seguros de salud son una opción cada vez más demandada por las personas que quieren acceder a una atención sanitaria de calidad. La sanidad pública en nuestro país es de calidad, pero con el seguro privado de salud se evitan las largas lista de espera, y además te dan la posibilidad de elegir el médico y el centro que prefieras. En este artículo vamos a hablarte de los seguros de salud para personas mayores, y de si se diferencian en algo con el resto de las pólizas de salud.

Ten en cuenta que, no todos los seguros de salud son iguales, ni se adaptan a las necesidades de todos los clientes. En especial, las personas mayores pueden encontrar dificultades a la hora de contratar un seguro de salud, ya que muchas compañías ponen límites de edad, exclusiones o carencias que pueden afectar a su cobertura. Por eso, es importante conocer las características y las diferencias de los seguros de salud para personas mayores, así como las opciones que existen en el mercado, para poder elegir el que mejor se ajuste a cada situación.

¿Qué son los seguros de salud para personas mayores?

Los seguros de salud para personas mayores son aquellos que ofrecen una cobertura sanitaria específica para este colectivo, teniendo en cuenta sus necesidades y sus riesgos. Estos seguros suelen incluir las siguientes prestaciones:

• Medicina primaria y especialidades médicas, con acceso a un amplio cuadro médico.
• Pruebas diagnósticas y tratamientos especiales, como fisioterapia, podología, psicología o logopedia.
• Hospitalización y cirugía, con habitación individual y cama para acompañante.
• Asistencia médica en el extranjero, con un límite de gastos y de duración.
• Segunda opinión médica, en caso de enfermedades graves o complejas.
• Servicios adicionales, como atención telefónica, ambulancias o reembolsos de gastos.

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¿Qué diferencias hay entre los seguros de salud para personas mayores y los normales?

Los seguros de salud para personas mayores se diferencian de los normales en varios aspectos, como, por ejemplo, la edad de contratación y permanencia. Y es que, las pólizas de salud normales suelen tener una edad máxima de contratación entre los 65 y los 75 años, y una edad máxima de permanencia entre los 80 y los 90 años. Mientras que los seguros de salud para personas mayores suelen tener una edad mínima de contratación entre los 60 y los 70 años, y no tienen edad máxima de permanencia.

Por otro lado, las coberturas de las pólizas de salud habituales suelen ser más amplias y variadas, incluyendo, entre otras cosas, servicios como la cobertura dental, la reproducción asistida o las medicinas alternativas. Sin embargo, los seguros de salud para personas mayores suelen ofrecer una cobertura más limitada y enfocada a las necesidades más habituales de este colectivo, como las consultas geriátricas, las prótesis internas o los trasplantes.

Por último, otra de las grandes diferencias entre los seguros de salud normales y las pólizas médicas para personas mayores la encontramos en el precio. Y es que, los primeros suelen tener un precio más bajo y estable, que se calcula en función del perfil del cliente y del tipo de póliza. Mientras que los seguros de salud para personas mayores suelen tener un precio más alto y variable, que se incrementa cada año según la edad del cliente y el uso que haga del seguro.

Ventajas de los seguros de salud para personas mayores

Los seguros de salud para personas mayores tienen una serie de ventajas que los hacen muy atractivos para este colectivo, que busca una atención sanitaria de calidad, personalizada y sin demoras. Algunas de estas ventajas son:

Acceso a un amplio cuadro médico

Estos seguros de salud permiten acceder a un amplio cuadro médico, formado por profesionales especializados y reconocidos en el sector. De esta forma, se puede elegir el médico y el centro que más convenga, sin depender de la sanidad pública ni de sus listas de espera.

Cobertura de pruebas diagnósticas y tratamientos especiales

Las pólizas de salud para personas mayores cubren las pruebas diagnósticas y los tratamientos especiales que se puedan necesitar, como análisis clínicos, radiografías, ecografías, resonancias magnéticas, fisioterapia, podología, psicología o logopedia. Estos servicios suelen tener un alto coste en el mercado privado, por lo que contar con un seguro que los incluya supone un gran ahorro económico.

Hospitalización y cirugía con comodidad

Los seguros de salud para personas mayores también cubren la hospitalización y la cirugía en caso de necesidad, ofreciendo una estancia cómoda y tranquila en habitaciones individuales con cama para acompañante. Además, se puede acceder a las técnicas quirúrgicas más avanzadas y menos invasivas, lo que reduce el tiempo de recuperación y las posibles complicaciones.

Segunda opinión médica

Estas pólizas para personas mayores también dan la posibilidad de solicitar una segunda opinión médica, en caso de que se tenga una enfermedad grave o compleja y se quiera contrastar el diagnóstico o el tratamiento con otro especialista. Esta cobertura puede ser muy valiosa para tomar decisiones informadas y buscar las mejores opciones terapéuticas.

Como conclusión, los seguros de salud para personas mayores son una opción interesante para este colectivo, que puede beneficiarse de una atención sanitaria de calidad, adaptada a sus necesidades y sin esperas. Sin embargo, hay que tener en cuenta las diferencias que existen entre estos seguros y los normales, así como las opciones que hay en el mercado, para poder elegir el que mejor se ajuste a cada situación.

En Aon somos expertos en seguros de salud para personas mayores, buscando la póliza que mejor se adapte a las necesidades del cliente. Si quieres más información o presupuesto sin compromiso, no dudes en contactar con nosotros, estaremos encantados de atenderte.