La salud es un derecho fundamental y un bien preciado que todos queremos preservar y mejorar. En España, existen dos formas principales de acceder a los servicios sanitarios: el seguro de salud privado y la seguridad pública que está gestionado por el Sistema Nacional de Salud (SNS), mientras el sistema privado de salud, está gestionado por las entidades aseguradoras y los centros sanitarios privados.

Los dos sistemas tienen sus ventajas e inconvenientes, y conviven en un modelo mixto que permite a los ciudadanos elegir la opción que más se adapte a sus necesidades y preferencias.

Sistema público de salud

El sistema público de salud ofrece una cobertura universal y gratuita a todos los españoles y a los extranjeros con residencia legal y habitual en el territorio nacional. El Sistema Nacional de Salud se financia con los impuestos generales y con las cotizaciones sociales de los trabajadores y empleadores.

Este sistema público garantiza el acceso a los servicios médicos y farmacéuticos necesarios para conservar y restablecer la salud, así como la prevención, la promoción y la protección de la salud pública. Se organiza en 17 servicios de salud autonómicos, que tienen competencias para planificar, gestionar y evaluar la asistencia sanitaria en sus respectivos territorios.

Sistema privado de salud

Por su parte, el sistema privado de salud ofrece una cobertura complementaria o alternativa al sistema público, mediante el pago de una prima o cuota mensual por parte de los usuarios. El sistema privado se compone de las entidades aseguradoras, que ofrecen distintos tipos de pólizas de salud con diferentes niveles de cobertura, servicios y prestaciones.

También existen los centros sanitarios privados, que prestan la asistencia sanitaria a los asegurados o a los pacientes que pagan directamente por sus servicios. El sistema privado se caracteriza por ofrecer una mayor rapidez, una atención personalizada, la libertad de elección de médico y centro, así como el acceso a la tecnología más puntera.

Comparativa del sistema publicó y el sistema privado

Según el Sistema de Cuentas de Salud, en 2020 el gasto sanitario en España representó un 10,9% del PIB, siendo un 8% financiado con recursos públicos y un 2,9% con recursos privados. El gasto sanitario público ascendió a 88.063 millones de euros, lo que supone un aumento del 11,88% respecto al año anterior, debido a la pandemia de COVID-19.

Mientras que el gasto sanitario privado fue de 32.056 millones de euros, lo que representa un descenso del 5,86% respecto al año anterior. El gasto sanitario por habitante fue de 2.454 euros, de los cuales 1.893 euros correspondieron al gasto público y 561 euros al gasto privado.

En cuanto al número de usuarios, según la Encuesta Nacional de Salud de España 2020, el 74% de la población utiliza exclusivamente el sistema público de salud, el 16% utiliza ambos sistemas (público y privado) y el 10% utiliza solo el sistema privado. Estos porcentajes son similares a los de la encuesta anterior del año 2017. Sin embargo, se observa una disminución del uso de los servicios sanitarios en general, tanto públicos como privados, debido a la crisis sanitaria y al confinamiento. Por ejemplo, el porcentaje de personas que acudieron al médico en los últimos cuatro meses pasó del 67% en 2017 al 54% en 2020.

Según datos de Unespa, Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras, del año 2021, en nuestro país había 11,6 millones de personas que pagaban un seguro de salud privado. Unas cifras muy buenas para un sector que está al alza, en el que en 2022 han batido el récord de facturación con más de 10.540 millones de euros, que suponen un incremento interanual del 7% respecto a 2021. Algo que según una encuesta realizada por Datos RTVE a usuarios del seguro de salud privado se debe a la mejor atención al usuario y la reducción de los tiempos de espera.

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Tres comunidades tienen más del 30% de los seguros de salud privados

Cerca de 1 de cada 4 españoles cuenta con un seguro de salud privado, datos que se incrementan en las comunidades de Madrid, Cataluña y Baleares. Y es que, en estas tres comunidades al menos un 30% de sus habitantes cuenta con un seguro de salud privado.

Otro dato relevante es que, más del 21% de las consultas de atención especializada registradas por el Ministerio de Sanidad en el año 2020 se atendieron en centros privados. Mientras que, si acudimos al barómetro sanitario de CIS, en el año 2022, el 40% de los encuestados prefiere la sanidad privada cuando tienen que visitar a un especialista sanitario.

En resumen, el sistema sanitario español se basa en un modelo mixto que combina el seguro de salud privado y la seguridad pública. Ambos sistemas presentan ventajas e inconvenientes para los usuarios, que pueden elegir la opción que más les convenga según sus necesidades y preferencias. Pero lo cierto es que, los españoles cada vez están más molestos con las largas listas de espera de la sanidad pública, y cada vez hay más habitantes que se deciden por la contratación de un seguro de salud privado.

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