La ansiedad es una manera que tiene el cuerpo de defenderse y hacer frente a una amenaza. Para prepararse, el cerebro compara la información del pasado (los recuerdos) con los estímulos del presente para poder predecir qué va a pasar en el futuro.
En sí misma la ansiedad no es mala ni hay que pretender que desaparezca completamente. Es bueno encontrar formas de tratar la ansiedad. Hay momentos en los que necesitamos estar alerta, y la ansiedad no es otra cosa.
Lo que sí debemos hacer es estar atentos para poder controlarla y que no se convierta en un trastorno.
Síntomas de la ansiedad
Quizá alguna vez hayas sentido síntomas de ansiedad pero no los hayas identificado como tal. Es importante ser conscientes de ello para evitar que supongan un problema para la vida.
Ten en cuenta que una de cada cinco personas tendrá un trastorno por ansiedad a lo largo de su vida, por lo que es uno de los problemas de salud mental más comunes.
Hay muchas maneras en las que se puede manifestar la ansiedad. Estos son los síntomas más comunes:
- Sensación de ahogo o falta de aire.
- Mareos e inestabilidad.
- Palpitaciones o aumento de la frecuencia cardíaca, con opresión torácica.
- Sudoración.
- Temblores y escalofríos.
- Sensación de estar alejado de la realidad o incluso de uno mismo.
- Dificultad para pensar claramente o concentrarse.
- Náuseas.
- Sensación de hormigueo.
- Cambios de humor.
¿Cuáles son los trastornos de la ansiedad?
Existe un trastorno de ansiedad cuando aparecen miedos o preocupaciones excesivas que afectan al desarrollo de la vida y provocan un gran malestar a la persona que los padece.
Hay diferentes tipos de ansiedad según el foco principal del miedo:
- Fobias: es la ansiedad que se produce cuando se tiene miedo intenso a algo. Las más comunes son a las alturas, a algunos animales, a viajar en avión… También existen fobias sociales, que son aquellas que suceden cuando son las conversaciones o la exposición a otros las que desencadenan la ansiedad.
- Ansiedad por separación: se da sobre todo en menores que sufren cuando se separan de sus padres o cuidadores en situaciones cotidianas.
- Trastorno de ansiedad generalizado: una preocupación constante por las cosas del día a día.
- Pánico: son episodios de ansiedad repentinos acompañados de sensaciones físicas. Suelen ser palpitaciones, ahogo, mareos, miedo a que suceda algo horrible y otros síntomas que pueden acabar incluso en desmayo.
Tratamiento de la ansiedad
El trastorno por ansiedad es un círculo vicioso que tiende a fortalecerse, por lo que hay que tratarla desde que aparecen los primeros episodios para que no se convierta en una enfermedad crónica.
La manera de tratarla cambiará según los síntomas.
En los casos más leves, puede que con psicoterapia y cambios en el estilo de vida se consiga una mejora significativa. Hay otros casos en los que habrá que combinar la terapia con ansiolíticos, siempre bajo receta médica y con prescripción de un profesional de la salud.
Si tienes síntomas no lo dejes pasar, pide ayuda a un profesional inmediatamente. Si quieres consultar los mejores especialistas, contacta con nosotros y te ayudaremos a encontrar el seguro de salud que más se adecue a tus necesidades.
